Mitos de Cali

LA LLORONA DE SAN ANTONIO: En el año 1593 vivía en el barrio de San Antonio el Concejal  Álvaro Pérez Llanos con su esposa Micaela, un matrimonio que pertenecía a la clase alta de la ciudad. Con ellos vivía una hermosa joven empleada, gitana y mestiza exuberante belleza, llamada Margarita Hernández. La leyenda cuenta que Margarita conoció en una fiesta a don Salvador de Ribera, del cual se enamoró a primera vista, aquí empezó la tragedia. Salvador estaba casado con doña Ana Maldonado, quien al darse cuenta de la infidelidad de su esposo envió una carta al Obispo en España, acusando a la pareja de adulterio y a don Álvaro Pérez, amigo de la familia de alcahueta. La carta llego a manos de la familia Pérez y al darse cuenta del penoso incidente decidió matar a don Salvador. Don Álvaro Pérez espero al enamorado tras la puerta de su casa, al verlo llegar desenvaino su espada para darle muerte, pero don Salvador se defendió con su espada e hirió a don Álvaro.


El alboroto despertó a Micaela, la señora de la casa, quien al darse cuenta del asunto, golpeo casi hasta la muerte a Margarita su empleada, la acuso de ramera y la echo de a casa. Margarita, se suicidó en su alcoba y don salvador, por su parte, fue acusado de adulterio y desterrado de sus tierras.
La familia Pérez, intento ocultar la desgracia y para eso lanzo el cuerpo de Margarita envuelto en una manta, aun mulada. Pero  ahí no termino la desgracia, Don Álvaro  Pérez  comenzó a sentir ruidos en la sala de su casa y en unos de sus chequeos fue atacado  con furia por el que se dice que era el fantasma de Margarita. 
El suceso se repitió consecutivamente durante  varias noches. Se dice que Margarita deambula  las calles de san Antonio llorando su pena. 




LA LEYENDA DE LA TORRE MUDEJAR: La torre mudéjar se yergue en los ámbitos de la ciudad de Cali, como una llamarada de la arcilla humana. Es como el símbolo del amor de Jesucristo, que asciende hasta lo alto; la quinta  esencia de la arquitectura morisca gastada en la entraña fecunda de un continente. La torre del templo de san francisco de Cali, varias veces centenarias, es una joya rara, y en ella como entre un motivo exótico, entre sus galas y majestad, ha jugueteado, como un hada traviesa, la imaginación popular. Sobre su origen han sido tejidas varias versiones de leyenda, todas con tres personajes centrales: una dama española, un  moro y un peninsular de abolengo. Cuéntese que un árabe por más señales constructor, estaba locamente enamorado de una  bella dama, hija de un hombre de postín y dinero  de la entonces naciente villa de Santiago de Cali. La dama le correspondía. Furtivamente tenía las dos comunicaciones y el amor creció hasta tal punto, que los dos no vieron una solución mejor que el matrimonio inmediato para atar sus vidas. Así las cosas, él lo propuso y todo fue convenido para llevarlo a afecto. El padre de la dama, hombre orgulloso de su poderío, sobre manera adinerado, llego a tener noticias del suceso próximo por lo cual, ni corto ni perezoso, movió todos sus resortes para impedirles la realización de su propósito. De este modo, el mancebo enamorado, hijo de arabia, fue juzgado y luego sentenciado a tanto como para que la condena se cumpliera y así, a solicitud del antiguo beduino, le fue conmutada la pena máxima por la construcción de una obra que fuera ornamento de la villa caleña. Así surgió la torre morisca de la ciudad de Cali.


LA MANO DEL NEGRO (versión número uno)En los tiempos de la colonia, un esclavo negro fue sentenciado por su amo español, un hombre sin entrañas a sufrir la pena capital golpes de garrote y latigazos, en la eminencia conocida en cli con el nombre de “la Loma de la cruz”. Se le imputaba el delito de robos de varias monedas  de oro, hecho negado con todas sus fuerzas por  el negro el castigo fue cumplido en forma inmisericorde y bárbara, habiendo quedado el negro aparentemente muerto pero en realidad exánime e inconsciente por la dura muenda. Así lo sepultaron en lo más alto de la loma de la cruz situada en el barrio “san Bosco”. Al día siguiente apareció por encima de la sepultura crispados los dedos y amenazante la velluda mano del sentenciado, como clamando venganza.

Se dice que el hombre, en un esfuerzo por reincorporarse, cuando oscilaba  entre la vida y la muerte, logró sacar la extremidad  por entre  la tierra, en esfuerzo instintivo sobrecogedor. Los dedos índices y pulgares cruzados para formar la cruz, hablaron a las gentes de una atroz injusticia que se cometía. Este  sitio  de Cali se hizo famoso desde entonces.

EL FANTASMA DE PICHINDE: En 1.685 un fraile misionero construyo una iglesia en Pichinde, km. 19 carretera a yanaconas, en la que ubico la imagen gigante de una virgen que el mismo había traído desde quito y cuyos ojos eran dos esmeraldas de gran valor. Un día llego al pueblo un apuesto sacerdote, de quien la gente dice que no se había ordenado ante Dios  


Y que se ganó fácilmente la confianza de los feligreses  de mises y sermones, sin embargo, a los pocos días de su arribo, el hombre fue hallado  muerto en la iglesia, aplastado por la imagen de piedra de la virgen, cuyos ojos de esmeralda, habían desaparecido. Desde entonces, justo a la hora de la oración en la localidad de Peñas blancas, se aparece el supuesto sacerdote solicitando por la Carretera un aventón pero desaparece de inmediato una vez recogido por los conductores lo que dice la leyenda es que el padre “suplantador” sigue buscando a los ladrones que se llevaron las esmeraldas, piedras de las que siempre se quiso adueñar.


LEYENDA SOBRE EL DEMONIO EN EL CERRO DE LAS TRES CRUCES: Se cuenta que satanás en sus andanzas decidió tentar y perder en forma total a Cali, en tiempos de la colonia. Venia el de cumplir su maléfica misión desde España, donde había aprovechado el imperio de la inquisición y como su emigración hacia tierras americanas fue “advertida por varios espiritistas” hubo mucha alarma porque, según fue dicho la presencia de Mefistófeles produciría la rebelión de los indígenas y mestizos esclavizados física y económicamente, lo cual no convenía a los intereses feudales de España.



LA BOLA DE FUEGO: Ella es, como su nombre lo dice, una bola de candela de aproximadamente dos metros que se desplaza con gran ligereza en medio de la sabana y el monte; cuando se detiene, lanza grandes chispas y se transforma en una mujer alta y fea que se cubre con la misma bola. En sus brazos lleva un niño sin cabeza y un hacha. Persigue a los hombres que se hacen llamar juan y mientras los encuentra, vive errante asustando a los llaneros durante la noche.


JUAN MACHETE: Es un ser misterioso  que aparece en la inmensa llanura en las noches oscuras y tenebrosas. Su cara es invisible y porta en su cintura un gigantesco machete. Se enriqueció haciendo pactos con el diablo, comprometiéndose a entregar su alma, la de su esposa y la de su hija. Adquirió abundante ganadería y haciendas y marco su ganado con una cruz y una jota.